St. Francis of Assisi Weekly Reflections

Grow Rich in what matters to God

07-31-2016Weekly Reflection

"You fool, this night your life will be demanded of you" (Luke 12:20). Hardly sounds like mercy! Unlike some contemporary rich folks, there is no indication of lying, stealing, or cheating in Jesus' parable. The rich man made a living, not a killing. Why does Jesus name him "fool"? First, because of presumption. Five times in nine verses, the rich man declares, "I shall." God's not in charge here, I am! Second, selfishness—four times, "my/myself." No God, no neighbor; he talks to himself, about himself: my possessions, my productivity, my plans! So, instead of chasing "treasure for ourselves," Jesus and Pope Francis' Jubilee Year of Mercy bid us grow "rich in what matters to God" (12:21), namely, the corporal and spiritual works of mercy. Give food, drink, clothing, and healing; visit the imprisoned; bury the dead. Heal with Jesus' own gentleness the doubt, ignorance, and sins of others; comfort, forgive, be patient; and pray for the living and dead.

—Peter Scagnelli, Copyright © J. S. Paluch Co., Inc.

Propone Crecer en aquello que Vale ante Dios

"¡Insensato! Esta misma noche vas a morir" (Lucas 12:20). ¡Esto no suena misericordioso! A diferencia de algunos de sus contemporáneos, no hay evidencia de que el hombre rico de esta parábola de Jesús, haya mentido, robado o engañado. El hombre rico se ganaba la vida, no era un asesino. ¿Por qué Jesús lo llama "insensato"? Primero, por arrogante. En cinco versículos habla en primera persona, "Yo haré". Dios no está a cargo de la situación, es "él". Segundo, por egoísta. No hay mención de Dios, o del prójimo; él hombre rico se habla así mismo de él mismo: ¡mis posesiones, mi productividad, mis planes! Jesús y el Papa Francisco en este Año Jubilar de la Misericordia nos proponen: en lugar de desear "abundancia de bienes" para nosotros; hacernos ricos en aquello que "vale ante Dios" (12:21), es decir las obras de misericordia corporales y espirituales. Dar de comer, de beber, vestir y sanar; visitar a los prisioneros, enterrar a los muertos. Sanar con la misma gentileza de Jesús, la duda, la ignorancia y las culpas de los prójimos, confortar, perdonar, ser paciente y orar por los vivos y los muertos.

—Peter Scagnelli, Copyright © J. S. Paluch Co., Inc.

BACK TO LIST